Frustración infantil: cómo acompañarla según el temperamento del niño

Me llamo Patrícia, Soy Maestra, educadora, asesora familiar y estudiante de psicología.

Hoy vengo con uno de los TEMAZOS que más conflictos me provoca en el aula y fuera de ella. Sostener y acompañar la frustración en los niños (y adultos que no aprendieron a sostenerse).

Y una de las cosas que más veo nos cuesta sostener —a adultos y a niños— es la frustración. Y no, no siempre se manifiesta en rabietas o gritos.La frustración también se ve en el niño que se bloquea, en el adulto que se autosabotea, en la niña que lo deja todo por no hacerlo perfecto, o en la madre que ¨evita¨ sin darse cuenta porque siente que no llega a todo.

La frustración puede llevarnos a evasión, a desconexión o a entrar en piloto automático, como si ya no esperáramos nada diferente.Y cuando eso pasa, nos alejamos de nuestra versión centrada y coherente.Esa versión que acompaña con presencia, que pone límites desde la firmeza y el amor, y que sabe leer lo que hay detrás de cada emoción intensa.

¿Qué es la frustración infantil y qué nos está mostrando?

La frustración infantil no es un “mal comportamiento” ni un fallo del niño. Es una emoción que señala que algo que necesita o desea no se está cumpliendo.Y aquí es donde te invito a mirar más allá:

💡 ¿Qué me está pidiendo mi hijo realmente con esta reacción?

A veces puede querer algo material, pero, mi experiencia, siempre dice... detrás hay algo más profundo:

• Sentirse capaz

• Sentirse visto

• Sentir que puede decidir algo

• Sentir que es suficiente

La clave está en no reaccionar al síntoma, sino escuchar la necesidad vital detrás del “¡quiero ya!” o del “no puedo”.

La frustración y el temperamento: ¿por qué no todos reaccionan igual?

Hace más de dos décadas que hago terapia, más de una que estudio temas de psicología y los aplico en mi y en mi proyecto y actualmente cursando la carrera de PSICOLOGÍA.

En uno de mis momentos de ¨búsqueda de estrategias¨, di con la teoría de los 4 TEMPERAMENTOS DE HIPÓCRATES, y en esta encontré sentido.

Empece a estudiarla y sobre todo a ver qué ideas podía crear para dentro del aula conseguir niños más tranquilos, serenos, más positivos, capaces y autónomos. Y lo cierto es que empezó a funcionar, más o menos tiempo pero todo me iba dando resultados.

Este enfoque de los temperamentos  nos permite entender qué necesita emocionalmente cada niño para sentirse seguro y comprendido.Y eso cambia radicalmente la forma en la que acompañamos su frustración.

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💙 Temperamento Melancólico: Niños que buscan ser perfectos y son altamente sensibles.

Suele frustrarse cuando no consigue hacer algo como se lo imaginaba. La frustración le conecta con su herida de “no soy suficiente”.

🗣 Qué decirle:"No importa si no sale perfecto. Lo que cuenta es lo que estás aprendiendo al intentarlo."

🧠 Hábito a revisar:Evita corregir de más. Valora el esfuerzo y el proceso, no solo el resultado.

❤️ Temperamento Sanguíneo: Los niños ¨sociales, entusiastas y alegres¨qué necesitan emoción y satisfacer deseos inmediatos.

Cuando se siente ignorado, contenido o limitado, aparece la frustración. Teme no ser tenido en cuenta.

🗣 Qué decirle:"Para mi eres perfecto, hagas lo que hagas" Vamos a revisar qué nos duele y buscar formas de qué duela menos.

🧠 Hábito a revisar: Dar Micro objetivos donde lo importante sea prestar atención al proceso. Reconocer sin rendirse a la urgencia.

💛 Temperamento Colérico: Alta intensidad y necesidad de control

Se frustra cuando no puede decidir, ganar o tener el control. La frustración le toca la herida de “impotencia”.

🗣 Qué decirle:"No tienes que esforzarte para qué te vea, te veo y eres suficiente para mi."

🧠 Hábito a revisar: Evita las luchas de poder. Pon límites con firmeza, pero deja espacio para que decida dentro de lo posible y revisa la conexión emocional. Momentos de no hacer nada, de estar.

💚 Temperamento Flemático: Niños miedosos, calmados y con un mundo interno profundo

Su frustración no siempre explota, pero se acumula. Tiene miedo a no ser importante o no estar a la altura.

🗣 Qué decirle:"Eres importante, tu voz es importante, Puedes enfadarte, y está bien. No necesitas esconder lo que sientes, estoy contigo."

🧠 Hábito a revisar: No normalices su silencio. Necesita tiempos uno a uno para abrirse y sentirse escuchado sin presión.

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🧭 Conclusión: La frustración no es el problema, es la pista

La frustración infantil nos invita a parar y observar.¿Desde qué lugar estoy acompañando? ¿Desde el automatismo o desde la conciencia?¿Estoy enseñándole a sostener lo que siente o a evadirlo?

No podemos evitar la frustración en su camino, pero sí podemos regalarle herramientas para crecer con ella.

🪞 Y recuerda…

No estamos aquí para criar niños perfectos o evitar que sufran, sino personas conectadas consigo mismas, con recursos personales a los que recurrir cuando tengan problemas!