Temperamentos infantiles. 🔥 Si tu hijo es colérico: cómo acompañar sus explosiones.
- Patricia Mendez
- hace 3 días
- 3 Min. de lectura
🌿 Sigo pesada con esta herramienta (y con razón)
Lo sé. Sigo hablando de los temperamentos infantiles una y otra vez…Pero es que esta herramienta da una luz impresionante.
Y si reconoces a tu hijo o hija en lo que voy a contarte hoy, quiero que te lleves ideas prácticas para empezar a ver cambios reales —esos que devuelven el equilibrio a casa y nos ayudan a estar todos más en nuestro centro.

🌱 ¿Qué significa “estar en el centro”? La clave de los Temperamentos infantiles.
Todos nacemos con algo innato: talentos, intereses, una energía propia.Y eso tiene dos caras. Lo que nos hace fuertes también puede ser lo que más nos desborda.
Hace más de 10 años descubrí esta herramienta y me cambió la forma de ver a los niños. Hoy quiero hablarte de uno de los temperamentos más intensos y fascinantes: el colérico.
🔥 El temperamento colérico: el fuego que mueve el mundo
El colérico es, de los temperamentos infantiles, el fuego. Es energía, dirección, impulso.
Son esos niños que:
Lideran incluso sin darse cuenta.
Tienen una determinación impresionante.
Son decididos, resolutivos, nunca se rinden.
Les gusta organizar, dirigir, mandar (sí, a veces demasiado).
No se conforman fácilmente: quieren entender, mejorar, avanzar.
Ejemplo: ese niño que en un juego acaba diciendo “no, no, así no se hace, hay que hacerlo de otra forma” o que se frustra cuando los demás no siguen el plan.
O esa niña que cuando algo sale mal, no llora, se enfada y busca la manera de arreglarlo ya.
⚡ El lado oscuro del fuego
Cuando esta energía se desequilibra, aparece su sombra. El colérico puede mostrarse:
Dominante o controlador.
Impaciente.
Exigente con los demás.
Poco empático.
Frío emocionalmente, aunque por dentro sufre mucho.
No es maldad. Es inseguridad transformada en control. El colérico siente que si no toma el mando, todo puede desmoronarse.
💔 La herida del colérico: la inseguridad (o la injusticia)
En el fondo, el colérico busca seguridad. Siente que algo a su alrededor no está en orden —una injusticia, un vacío, una falta de estructura— y se promete arreglarlo.
Por eso necesita tener razón, necesita liderar, necesita controlarlo todo. Su fuego nace del deseo de poner orden donde hubo caos.
💡 La gran idea que puede cambiarlo todo
Si tu hijo o hija tiene este temperamento, recuerda:
➡️ Su energía no es el problema.
➡️ El problema es ¨sentir inseguridad, miedo¨.
Tu tarea es recordarle, una y otra vez, con amor y firmeza:
“Las decisiones grandes las tomamos los adultos. Tú puedes tomar las tuyas pequeñas.”“Siempre hay alguien que te protege y te sostiene.”
Estas frases, repetidas como mantras diarios o antes de dormir, pueden calmar ese fuego interior y devolverle su centro.
Acompañadas de cuentos, rutinas o diarios donde pueda escribir o dibujar sus ideas, ayudan a canalizar su necesidad de control sin apagar su fuerza natural.
✨ Lo que puedes hacer desde casa
Valida su fuerza. No le digas “no seas mandón”; dile “veo que te gusta liderar, vamos a hacerlo juntos”.
Enséñale que no todo depende de él. Ayúdale a confiar.
Dale espacios de responsabilidad real. Tareas, decisiones pequeñas, proyectos.
Usa rituales de calma. Respirar juntos, dibujar fuego que se transforma en luz.
Recuérdale que puede soltar. Que no todo necesita solución inmediata.
🪶 Para ti, mamá o papá consciente
Si te has reconocido en todo esto, te animo a seguir profundizando.Este mes, en nuestra newsletter gratuita, hablamos cada semana sobre autoconocimiento y temperamentos infantiles, con herramientas prácticas para cada tipo de niño.
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